Por su localización geográfica al Sur del continente europeo, el clima sevillano es mediterráneo continental, con precipitaciones variables, veranos secos cálidos e inviernos bastante suaves.
Una temperatura media de 18,6º C, de las mas altas de Europa, y 2.898 horas anuales de sol aseguran un clima excelente
durante casi todo el año, siendo enero el mes
más frío y julio el más caluroso.
Sevilla es una ciudad de pluviometría moderada, con apenas 52 días de lluvia de promedio anual que se acumulan, sobre todo, entre los meses de octubre y abril, recogiéndose en total unos 534 mm, con el mes de diciembre como el más lluvioso.
Visitar Sevilla es aconsejable en cualquier época del año, por sus agradables temperaturas y su ambiente festivo que permiten disfrutar de la ciudad a cualquier hora del día o de la noche. Durante la primavera se celebran sus Fiestas Mayores, Semana Santa y Feria de Abril, momen- to en que la urbe se llena de color y alegría, de aromas perfumados, de sonidos, en un permanente deleite para los sentidos.
Un momento inolvidable para los visitantes es durante la floración de los naranjos, muy abundantes en el casco histórico y en la zona del Aljarafe y la Vega del Guadalquivir, que inundan con el perfume del azahar todos los rincones y, que cuando coincide con la celebración de la Semana Santa convierten la estancia en la ciudad en una experiencia mágica que se desea repetir.